jueves, 9 de enero de 2020

Bart vs. Australia vs. el control biológico vs. las especies exóticas

En el episodio Bart contra Australia 6x19, Los Simpsons nos muestran una parte poco conocida de las leyes Australianas (aunque bastante cuestionable en cuanto su veracidad), pero también exponen los riesgos de introducir especies exóticas a un ambiente distinto.




La familia viaja a Australia porque Bart tiene que disculparse con el país por una broma telefónica, pero debido a que las normas de introducción de especies al país son muy estrictas, Bart se deshace de su rana dejándola libre antes de entrar oficialmente a Australia. La rana escapa y al poco tiempo se dispersa por todo el país; incluso los australianos se muestran extrañados al ver este tipo de animal que confunden con un reptil.

 Aunque en realidad sí existen anfibios en Australia, hay muy poca diversidad de éstos.




No tiene caso describir los sucesos del capítulo ya que es muy conocido, y seguramente usted se sabrá de memoria hasta el último detalle de los diálogos y escenas, como cualquier persona normal que ve de 2 a 3 capítulos diariamente. Sin embargo, quizá no conozca que esta situación sucedió anteriormente en Australia y también involucrando a un anfibio.



Todo inició durante 1935, cuando los 
campos de caña australianos enfrentaban una fuerte plaga de escarabajos conocidos como escarabajos de la caña. El gobierno propuso introducir una especie que funcionara como un control biológico para eliminar la plaga. La especie elegida fue Rhinella marina, un sapo nativo de América central y América del Sur. La plaga fue poco controlada con la introducción de alrededor de 3 mil ejemplares de anfibios, pero al poco tiempo los sapos se reprodujeron exponencialmente, siendo hoy una plaga de más de 200 millones de individuos.



En ambos casos, el de Los Simpsons y el de la vida real, la rana y el sapo se convirtieron en una plaga debido a que es una especie exótica o introducida; esto quiere decir que la especie no ha tenido un proceso de evolución ni coevolución con el ambiente de Australia, y por ello no tiene depredadores naturales. Los animales que intentaron depredar a los sapos en un principio, se intoxicaban porque que no tenían ninguna adaptación en contra de las toxinas que produce la piel del sapo; y al no ser depredada, la especie pudo diseminarse muy fácilmente.




Existen muchos casos en el mundo como este pero uno que también ocurrió a partir de “buenas intenciones” mal logradas, fue en México donde se pretendió reforestar el país con eucaliptos, árboles nativos de Australia. Los árboles tuvieron y tienen gran éxito de dispersión por las mismas razones que los sapos en Australia, no co-evolucionaron en el ambiente mexicano y poseen sustancias que son tóxicas para las especies nativas de plantas y también de algunos herbívoros.


Finalmente, podemos concluir que la lección de este episodio es sobre los grandes beneficios del control biológico, donde nada puede malir sal XD...